La distancia emocional es diferente de unas personas a otras y no tiene nada que ver con el grado de amor que sentimos por el otro, sin embargo, es una de las principales fuentes de conflicto en las parejas y en otros tipos de relaciones. Trabajaremos el concepto de “Hybris” y su repercusión en nuestras relaciones.
Puede suceder que la dependencia se acabe convirtiendo en una verdadera adicción a la otra persona, la cual tiene su origen, casi siempre, en un hambre voraz de cariño por carencias afectivas de la infancia. Esto nos acaba llevando a una serie de pensamientos distorsionados que no hacen más que empeorar la situación y que las relaciones sean cada vez más dolorosas.
¿Cuántas veces estamos involucrados en una relación destructiva, o cuando menos, nada satisfactoria y sin demasiado futuro, y aun así somos incapaces de acabar con ella?
¿Quién no ha sentido que todo su mundo se venía abajo ante una ruptura sentimental?
Mediante diferentes herramientas terapéuticas iremos revisando todos esos pensamientos deformados y nos adentraremos en los procesos psicológicos que subyacen en la dependencia emocional. Lo principal es llegar a conocernos a nosotros mismos, entender por qué nos pasa lo que nos pasa, reconocer nuestros errores repetitivos, aceptarnos sea cual sea lo que encontremos, y a partir de ahí, trabajarnos esa dependencia a través de la construcción de un “self” fuerte, de un amor incondicional a nosotros mismos y de buena compañía.